Viaje a los Pirineos

Al final de sexto de primaria del colegio Voramar hicimos un viaje a los Pirineos los de sexto B y A que era de una semana, yo tenía preparada la mochila y la tienda de campaña hace 3 días antes del viaje. Cuando llegó el día para irnos, como siempre todos los padres y los mas sensibles se pusieron a llorar, cuando ya habíamos subido al autobús empezó una nueva aventura para mí. El viaje duró unas 12 o 13 horas aproximadamente, cada 3 horas y media parabamos para comer o ir al baño o alguna otra cosa. Cuando ya llegamos al pueblo era casi de noche, subimos a las habitaciones y nos reunimos todos abajo del hotel para ir a pasear por el pueblo y conocer todoy despúes fuimos a cenar y para las habitaciones. Cuando los profesores nos despertaron a las ¡7! de la mañana, para ir a hacer la escalada y para ir a poner las tiendas de campaña y acampar en un sitio bueno para todo. el camino era muy duro pero a la vez muy divertido, llegamos y pusimos todo en orden, por la noche nos lo pasamos muy bien contando cosas de miedo. A la mañana siguente como siempre a las 7 de la mañana nos labamos la manos y la cara en un río que estaba super helada el agua, fuimos a hacer escalada por la montaña y por el camino nos emcontrabamos trozos de nieve y muchas más cosas. En un momento tubimos que pasar por un sitio que era en cuesta y era todo nieve, entonces si te resvalabas t caías para abajo, por suerte pudimos pasar y más adelante no pudimos pasar porque había mucha nieve. Nos volvimos y nos fuimos al hotel y fuimos a coger todo el equipaje y nos fuimos a otro pueblo un poco más moderno. Cuando llegamos el hotel no estaba nada mal, nos fuimos a hacer compras para nuestras familias y por la noche había una discoteca al lado de nuestro hotel y pasamos a bailar, luego fuimos a jugar al billar o a los bolos y habían premio, al día siguiente ya estabamos haciendo el equipaje porque ya nos ibamos para nustras casas, hicimos el mismo recorrido que a la ida y como estabamos casi todos muy cansados nos pusimos a dormir, ya cuando llegamos todos se pusieron a llorar los padres algunos hijos hasta ami se me escapó alguna lágrima, pero lo importante era que habíamos llegado sanos y salvos y estabamos con nuestras familias.

Un Viaje a Italia

Un día, en el anochecer del 31 de Diciembre, lloviznava en la ciudad de Berlín, una familia como cualquier otra iban a sacar un billete de lotería como hacía todos los años, para provar a ver si había suerte. Pasaron días para que salga el afortunado de ese dineral o si querían un viaje a Italia. Los padres se lo pensaron y dijeron que como los niños ya estaban acabando el colegio y un hijo trabajaba pero podía pedir vacaciones, decidieron elegir el viaje a Italia si eran ellos los afortunados. Como ya habían celebrado la nochevieja todos sus familiares que habían venido a celebrarla con ellos ya se habían ido. Al pasar un día encendieron la tele y vieron que estaban anunciando el premio y uno de los hijos llamaron a sus padres y fueron todos los que estaban el la casa a ver de quien era el premio, cuando dijeron el primer número ya se habían puesto a gritar, el segundo número y gritaron más aún y ya acabó de decir el número y saltaron de la alegría porque les había tocado a ellos. Rápidamente fueron a recoger el billete para viajar a Italia, y se fueron al centro comercial, se empezaron a comprar de todo de calcetines hasta cazadoras. Cuando ya llegó el día del viaje se subieron al avión y buscaron donde estaba su número para sentarse, cuando estaban a punto de sentarse vino una chica joven y guapa a preguntarles si ellos eran los que habían ganado el premio y todos dijeron que sí con la cabeza, y la chica dijo que si les podían firmar un autógrafo cada uno, todos afirmaron con la cabeza. La chica se fue a su sitio y todos tenían sueño porque se habían despertado temprano para ver el premio. Cuando llegaron eligieron a donde ir tenían a Roma, Nápoles o Venecia. Ellos se lo pensaron y eligieron Venecia porque era más bonito y querían conocer lugares nuevos. Cuando llegaron le empezaron a preguntar un montón de cosas pero ellos no entendían nada excepto un hijo de ellos de 15 años que justo estaba estudiando Italiano. Él les tradujo que si tenían a dónde ir a dormir y ellos contestaron que no, entonces el hombre muy amable les dijo que vinieran con él, le llevó a una casa grande y cómoda, a partir de ese momento hasta Febrero estuvieron ahí, tuvieron tiempo de conocer todo Venecia, en Febrero volvieron y empezaron todas sus vidas cotidianas.